Así lo expresó el poeta catalán Jean Paul Caribdis en la presentación del libro ‘Volver a brindar con extraños’, la tercera obra que publica en papel de la poetisa dolorense.

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‘Volver a brindar con extraños’ ha sido la obra que un jurado especializado ha elegido este año como triunfadora del premio que concede la librería cartagenera y centro cultural de La Montaña Mágica. La autora es Noelia Illán Conesa, de quien el poeta Jean Paul Caribdis expresó en la puesta de largo del libro que si José María Álvarez se reflejase en un espejo “y le pidiésemos que se transformara en mujer, tendría el cuerpo y la carne de Noelia”, frase que también refleja la admiración de la poetisa hacia el consagrado poeta y ensayista cartagenero, muy posiblemente, su maestro en buena parte de su faceta poética. Álvarez estuvo entre el público asistente en la puesta de largo del nuevo poemario.

Noelia Illán Conesa, tras agradecer la concesión de este galardón, desveló que el día en que le comunicaron por teléfono que su obra era la ganadora coincidió con el momento en que se estaba decidiendo el final de la revista ‘La Galla Ciencia’, la única exclusivamente en papel que se editaba en la Región de Murcia y que ha dejado huella en los  últimos años. Sin duda, un día de emociones encontradas.

Centrados en ‘Volver a brindar con extraños’, su tercera obra tras ‘Calamidad’ y ‘Verbos por dentelladas’, autora explica que, aunque es su último trabajo publicado, “en realidad fue escrito con anterioridad a los otros y no fue escrito en documento de ordenador y pensando en su publicación”, sino que son poemas que rescató de su adolescencia que estaban en una caja “que iba para la basura”. Sin embargo, Joaquín Baños, cogió los poemas escrito en papel y los desplegó sobre una mesa, diciéndole a Noelia que eran “los que salvaría”. Esa acción los conservó. Ella volvió a leerlos y “de repente me gustaron”. Fue el germen de lo que ahora se ha convertido en un libro. “Entonces, con esos poemas, creé una historia estructura en tres partes que hasta la me creo, aunque realmente no sucedió. Mi proceso fue inverso, no es que viví algo y lo cuento, sino que con todo ese material pensé qué se podía contar hasta conformar una historia verosímil”.


El libro invita a su lectura, por la brevedad y claridad, pero es importante leerlo de forma metódica y no en poemas aislados. Las tres partes, bajo denominación latina, son ‘la prima lux’ (primera luz), ‘vespere’ (después de comer o vespertino) y ‘vigilia’ (trasnoche). “Lo planteo con una primera parte que es la más confusa, una segunda que es la que percibe la realidad y una tercera que es la más lucida para la protagonista del libro”, explica la autora.