Los festejos dolorense presentan un buen ambiente de participación vecinal en su puesta de largo, que contó con el pregón del delegado del Gobierno en la Región, Diego Conesa, quien desveló que estudió tercero de BUP en el instituto San Isidoro. También estuvo la alcadesa, quien, como se observa en la imagen, bailó un vals. GALERÍA DE FOTOS (pinchar aquí)
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Los Dolores ya está inmerso en sus fiestas y lo ha hecho con un buen sabor de boca que deja la noche de apertura, especialmente por una sensible mayor presencia de vecinos y visitantes, que es la auténtica razón de ser de unos festejos populares.
Mario Ros, el presidente vecinal e integrante de la comisión de fiestas, abrió el capítulo de alocuciones mostrando su gratitud a los compañeros de organización, al Ayuntamiento y a los asistentes, indicando que las fiestas es punto de reunión de vecinos y amigos para “estrechar lazos”, apuntando el esfuerzo para que las fiestas crezcan “y no vayan hacia abajo”.
Después llegó el turno al pregonero, el delegado del Gobierno de la Región de Murcia, Diego Conesa, quien desveló que fue alumno del instituto San Isidoro cuando estudiaba tercero de BUP. Antiguos compañeros de clase coincidieron con él anoche en el recinto ferial. Su oratoria fue breve (unos nueve minutos), amena y variada, indicando que Los Dolores es “el barrio más emblemático de Cartagena que ya está integrado plenamente en la ciudad, pero con personalidad propia”, para también refererirse a sus valores patrimoniales (Castillito y Torre Llagostera, por ejemplo), colectivos (Mujeres Cartagonova, Ateneo, Casino, etc.) y a poetas que han anidado en este pueblo, como Carmen Conde, Antonio Oliver, María Teresa Cervantes y Marín Albalate. También resaltó la velada trovera que ofrece el programa de fiestas y concluyó trovando al barrio.
Después llegó el turno de entregar el premio por el dibujo ganador de un concurso organizado para el cartel y portada del libro de fiestas, cuya autora ha sido Naiara Almohalla, que le fue entregado por la directora del IES San Isidoro, María Ángeles Martínez, y por el delegado del Gobierno.
A continuación tuvo lugar la entrega de honores a la corte de honor, que este año integran en juveniles Lara Carrasco (Miss Dolorense), Rocío de la Cova (Miss Belleza) y Halú Lagostera (Miss Elegancia), con Isabel Pagán como Reina de Mayores, y Rosa Seara García, Eva García Ros, Paula Soler Vicente y María del Pilar Avellán Pedrero, como mises infantiles. Las bandas y coronas fueron impuestas también por Adela Gutiérrez, presidenta de Mujeres Cartagonova; Ana Guzmán, vicepresidenta de la Asociación de Vecinos; Juliana Otón, presidenta de la Junta Vecinal de Los Dolores; Asensio Madrid, vocal de la Junta Vecinal; Obdulia Gómez, edil del Ayuntamiento; y por la alcaldesa, Ana Belén Castejón, quien acudió al recinto ferial dolorense tras pronunciar el pregón inaugural de los festejos de La Aparecida. Entre el público también se encontraban los concejales Juan Pedro Torralba y Francisco Aznar, y el diputado regional socialista Antonio Guillamón, entre otros.
Hubo un pequeño incidente (apenas duró unos minutos) cuando un vecino se acercó al escenario dirigiéndose a las autoridades para reclamar más iluminación para este lugar fuera de las fiestas y que los coches pasen más despacio. Fue invitado a retirarse, pero al no acceder tuvo que intervenir la Policía Local. Quizás no fuese el lugar (me refiero a la forma no al fondo de su reclamación) para sus demandas, pues se trataba de unas fiestas populares en las que otros vecinos ha puesto un esfuerzo que no merecen ser deslucidos, al igual que la ilusión de las jóvenes integrantes de la corte de honor que vivieron una noche mágica.
Después subió al escenario World Dance Music, un grupo con ocho integrantes, lo que hacía mucho tiempo que no se vía en el barrio, y que además estuvo enriquecido por los bailes de tres integrantes de la comparsa cartagenera Renacer.